Pienso en aquellos momentos en que la mente te pide a gritos que liberes de su prisión a las palabras que tienen sed de verse plasmadas en un escrito, todas juntas, una con otra haciendo un orden perfecto, una armonía única, una combinación sublime… Es en esos instantes cuando comienzas a escribir, y en eso viene la satisfacción de haber creado… de ver tu creación frente a tus ojos…