La mayor falacia sobre escribir en un blog está en la idea de que hay espacio ilimitado para ello, y si existiese alguna limitación, es puramente la consecuencia del contenido. Ya podréis inferir que esto no es para nada cierto, ya que la verdadera limitación en este tipo de medios es la atención de vosotros, los lectores.
El uso de palabras no comunes, que inducen a su búsqueda en diccionarios de sinónimos nos da cuenta de la escasa atención que provoca la economía de palabras y finalmente, la síntesis de pensamientos que fácilmente os puede confundir.
La escritura es un proceso creativo que debe captar la atención del lector de principio a fin. Cuando tenéis el minuto de atención de alguien, la mejor forma de aprovecharlo es presentar argumentos persuasivos, una historia clara y simple, o incluso darle una noticia interesante. Eso es toda la creatividad que necesitáis para que ese minuto centre toda la atención del lector.
Un escritor que sienta placer al realizar su trabajo tiene la capacidad de editar cualquier artículo, hasta llegar a un escrito que tenga la esencia de ser elegante, interesante y agradable, transformándolo así en una completa experiencia literaria.