Sueño corrupto

Desde hace 4 años estos particulares pestañazos me despiertan con bochinche. Mis sueños corruptos -técnicamente llamados pesadillas– me llevan a un estado de ilapso, una especie de éxtasis contemplativo y exergónico. Algunos, que son pocos, me trasladan a la alegría más inimaginable. Otros, a los más horribles e inexplicables miedos. A continuación, detallaré el último sueño corrupto que tuve ayer.

El momento

A fortiori, quería dormir. Mi cuerpo estaba exhausto, me sentía mentalmente agotado y tenía ganas de hacer absolutamente nada. La disyuntiva: hace unos 5 años, mi costumbre por el dormir ha estado completamente abnegada, mi horario simplemente no existe y por consiguiente, se generó otro problema más grave: insomnio a nivel crónico. A pesar de esto, apagué todas las luces y la tecnología que estaba cerca y me acosté a las 4:47 AM.

Inmediatamente después, pensé en cómo era posible que me costase tanto conciliar el sueño, sabiendo que hay personas a las que sólo les basta un buen asiento para lograrlo. Me di tantas vueltas que, súbitamente, perdí el hilo del pensamiento y por un momento me apagué, o técnicamente estaba en la fase del sueño ligero.

Mi cerebro empezó a crear una historia muy simple: yo estaba escapando. No había un destino, dirección ni razón. Sólo yo escapando, íngrimo.

Pasó un rato, que difícilmente podría numerar en minutos ya que había perdido la noción del tiempo. Me di cuenta que era de noche, estaba cálido y vi un paisaje. Yo continuaba escapando pero pude reconocer el paisaje como el sector más sombrío y lúgubre que conozco de Santa Cruz de Chile, ciudad en donde actualmente vivo.

Quise arbitrariamente aplicar la oniromancia en este sueño, adivinar lo porvenir y saber qué era lo que exactamente me venía persiguiendo. No tuve éxito, pero vi algo que me perseguía, algo sui géneris propio de una sombra.

Desde ese momento el sueño se vuelve repetitivo e inacabable. Yo corriendo, en un lugar sombrío y lúgubre, de noche y escapando de algo que me generaba un miedo inexplicable.

Por fin desperté, aunque en pánico y adusto. Eran las 5:32 AM y mis planes para seguir durmiendo obviamente acababan de terminar. Aunque duró aproximadamente 40 minutos, para mi fueron horas.

Sueño lúcido

Circunstancialmente, es la primera vez que tengo un sueño corrupto estando consciente de que nada de lo que estaba pasando era real y sólo era producto de un proceso onírico.

Por definición, un sueño lúcido es donde la persona es consciente de que está soñado y es capaz de controlar la trama del sueño sin los límites que impone el centro de lógica del cerebro.

Como antecedente, anteriormente ya había tenido un sueño lúcido, pero la historia representaba a un sueño completamente normal. Al contrario, este sueño corrupto se me fue de las manos. El miedo que sentía fue tan fantástico que fui incapaz de controlarlo.

¿Por qué tuve miedo?

La gran pregunta. Esa sombra que me perseguía y me generó un miedo ad náuseam. ¿Pero por qué?

Quizás, sólo quizás, el sueño corrupto representa un implícito mensaje sobre mis verdaderos miedos. La historia, creada a partir de una acción simple, podría contener algún elemento que represente las condiciones propicias para empezar a sentir miedo.

Como resolución final, la característica in promptu de estos sueños corruptos me hace tenerle respeto a este proceso biológico.

Comentarios